Samuel, de “Élite”, me ha prestado su botón para retroceder en el tiempo. Lo he pulsado y le he pedido que me lleve a mayo de 2018, a nuestro viaje a Marrakech. Podéis ver aquí la última entrada sobre este viaje tan bonito, tan inspirador. Después de vivir una experiencia única en Berber Lodge pusimos rumbo a la ciudad, para perdernos entre el caos de la Medina y encontrar un nuevo oasis: Riad Up (aquí).
Del caos a la paz absoluta. Marrakech es una ciudad de contrastes. En los callejones de la Medina tienes que tener cuidado de no ser atropellado por un motorista o un carro tirado por burros. Pero una vez traspasas la puerta de tu riad, las cosas cambian.
Llevaba semanas esperando el momento oportuno para estrenarlo. Cuando cerré el viaje a Marrakech sabía que este vestido de Coosy tenía que estar en la maleta. Y el momento de estrenarlo llegó en el paraíso bereber de Berber Lodge. Cuando caía el día, con el cielo más rojo que nunca, y una copita de vino rosado en la mano.